Yuxta

Driado

19.10.2023

YUXTA
Un mapa conceptual de la fractalidad entre los episodios del programa.

​​Quiero hablar sobre las canciones y los tracks que componen los episodios de Yuxta, profundizar sobre el porqué las conecto dentro de un lugar común. ¿Qué historia cuentan en conjunto en su intersección? ¿Qué otras formas de memoria puedo vislumbrar en su interconexión? Yuxta es un ejercicio de identificación más allá de lo impuesto, una forma de entretejer espacios y tiempos dispares en nuestros territorios regionales.

Los cuatro episodios que conforman Yuxta se conectan ahora que hago su escucha profunda. Lido Pimienta, cuyo trabajo artístico es sumamente inspirador, está en el primer y segundo episodio (en colaboración con el Sexteto Tabalá con un son palenquero primero y luego con Wendy Sulca). En su mayoría, lxs artistas que resalto a lo largo de estos episodios discuten con su trabajo materias sobre nuestros relatos comunes, por fuera del desazón que dejó el colonialismo en nuestras historias y en nuestros horizontes, a veces incluso impidiendo la conectividad entre los pueblos. Esta idea emerge sobre todo en el segundo episodio, donde tomo a colación que nuestra historia en común es previa a la aparente conquista.

Géneros como el bounce de Nueva Orleans, cuyas expresiones se repiten en varios programas de la residencia (quizá inconscientemente), intentan difuminar esas fronteras entre las experiencias de los pueblos del norte con el sur del continente. La diáspora como conexión, territorios que se funden en la mezcla del bounce con ritmos como la salsa urbana del pacífico también conocida como salsa choke. El Pacífico sur americano y el sur de Estados Unidos son poblaciones con una gran concentración de personas afrodescendientes que tienen expresiones musicales fantásticas, y fruto de procesos socio-culturales muy valiosos. Siempre he sentido algo particularmente especial al mezclar estos dos géneros aparentemente dispares pero que funcionan en síntesis articulada de una forma sumamente interesante. ¿Qué mensaje está detrás de esta revelación?

Hay también en la mezcla un ejercicio de yuxtaposición. En esa imbricación que refleja esa unión espacio-temporal casi armoniosa me interesa ahondar con la propuesta del programa. Como en el cuarto episodio donde un candombe convive con un tango en una unión sonante y armoniosa… ese diálogo tiene algo que decir. Pero por supuesto tampoco descarto yuxtaposiciones que puedan resultar más incómodas, desafiando así el ansia por una homogeneidad hiper racional o purista. Incluso, a veces, esos lugares desafiantes son los más prolíficos para la apertura de nuevos horizontes y apuntan a ir más allá con la mezcla para ampliar la perspectiva del asunto. Hay una voz que nace en ese instante, que conecta y que destruye también esa balcanización aparente, que permite hablar de hechos aislados que se conectan en una gran red. Cada episodio habla de metresas, de matrices territoriales y de la construcción de puentes posibles que, a través del sonido, puedan llevarnos a interactuar con otras manifestaciones y con otras narrativas históricas.

El episodio tres habla de un futuro con una vitalidad de reconstrucción natural, volviendo el foco a espacios físicos como la Amazonía, en donde las fronteras entre naciones se difuminan por el entorno. Ese concepto lo conecta a su vez con el sentir del primer episodio que habla de lo vegetal, que se refiere más a un tipo de vitalidad posible en la proliferación de ideas, como menciona Johan Mijail al hablar del amor travesti y del amor vegetal.

En definitiva, los cuatro episodios juegan con diferentes conceptos que no sólo se reflejan en la música sino también en el arte de la tapa, en donde los colores son tonalidades geográficas, climas sonoros, y guías o amuletos visuales para la ruta que traza el programa.

  1. Agua, el Caribe y la migración. Lo insular y continental unidos en una cuenca acuática.

El término Caribe en parte tiene que ver con el concepto de Calibán, ese mito del salvaje que sirve como excusa para la colonización. Es ahi donde empieza la explotación colonial, la violación que inicia el continente. Es allí también donde surgen las primeras experiencias heroicas con Anacaona y Caonabo . El Caribe fue lugar de grandes migraciones de grupos originarios previas al concepto ambiguo de la “conquista” (lo que en verdad fue un proceso de dominación y opresión). Decidí empezar por el Caribe porque allí se conciben las primeras gestas independistas y es a partir de ahí que se logran dilucidar otras formas de identificación emancipatoria como así también de desidentificación por fuera del entramado colonial. Benkos Biohó en Palenque de Benkos (previamente de San Basilio) primer pueblo liberado y que empieza la lucha decolonial, también el caso de Haití la primera nación libre del continente, y la isla “La Española” donde se sitúa la vecina nación de República Dominicana , de dónde proviene la investigadora Johan Mijail cuyo trabajo sirvió para el desarrollo del programa, clave para entender esos procesos de des-identificación. De lo exótico y su extrañeza en el calibán, el Caribe pasa a ser sublime por esa posibilidad de liberación.

  1. Tierra, Andes, Ch’ixi (explosiones tempo-espaciales, más allá de un esqueleto de realidad colonial lineal).

Taypi, inclinaciones, arena, nieve, sólidos, vibraciones. Los conceptos aymaras hablan justo de esa yuxtaposición. Evocación y transformación, destrucción de los cimientos del mundo colonial. Otra vida es posible con un “pasado” que se ubique por delante, con otras lenguas y por lo tanto con otros sistemas de pensamiento por fuera del castellano. Algunos ejemplos de esto son el rap embera con Linaje Originarios o las canciones en quechua de Renata Flores.

  1. Selva, Pacífico, Lluvia , Oxígeno. Amazonía: pulmón del planeta. Brega y Salsa.

Papel de nuevos liderazgos que reivindican las luchas como Francia Marquez, presente en el sample de su presencia en el festival Petronio Alvarez. Búsqueda de Paz, armonía, arrullo / marimbas, currulao y baile.

  1. La fiesta urbana, el arrabal, la verbena. Fuego y Fluorescencias, arte picotera, la calle.

Vuelta al inicio con una nueva referencia a Palenque de Benkos en el caribe colombiano. Lo regional extracontinental, lo trans-continente. África en América. Unión y diáspora. Conexión Sur - Sur. Con el cuarto episodio volvemos al legado de Palenque, que es importantísimo tanto a nivel socio-cultural como musical. En materia de música fue un lugar de influencia mundial con grandes conexiones con el origen o por ser el epicentro del sonido afroantillano, considerándose como un territorio fundante y pionero de géneros como el son / clave, cumbia, salsa, champeta y mucha de la sonoridad de origen caribeño que influenció las músicas de todo el continente. Este episodio también hace referencia a la idea de ruido en contraposición al silencio en la historia y a una sensación de corte sónica en donde converge un aire de lo frenético, usando el samplismo, o finger drumming propio de los picós y las verbenas (donde se escuchan estos géneros en el caribe colombiano), o géneros africanos como en Tanzania con el Singeli. Esta idea también juega con lo emocional, con lo poético, a veces con algo melancólico en géneros como el tango; el sur como norte; la poética del puerto; el romanticismo; lo gótico; tambores digitales y llamada de cueros.

Después de presentar los programas en los estudios de Muito pienso en un ejercicio de nombrar esos ritmos que no fueron mencionados en el plan inicial, ese punto de partida que pensé antes de hacer cada episodio. Al haberlos mezclado en vivo, en las grabaciones se escucha el camino al libre guiamiento de las canciones. Escuchar los ritmos y las vueltas inesperadas es interesante ya que habla de otras formas de lectura de los episodios, como trances, receptores de señales.

El Singeli, por ejemplo, es un importante género contemporáneo que muestra la potencia experimental de la música de baile africana con una sonoridad súper potente, destructora de la métrica, incluso un poco incómoda para cierta esquematización de armonía dócil. La intensidad del Singeli puede llegar a ser muy grande, te hace sentir en la antesala a un estilo de trance. Más allá de lo banal de ciertas lecturas, el trance como lo ven varias culturas no occidentales habla sobre la idea del hiper-estar, como algo devorador del espacio distractivo, ese hiper-estar permite la conexión con lo trascendente y con la transformación. Esta sensación es analógica ,aunque particular por supuesto, en otro género : el Palo dominicano, que también hace parte del tracklist en el primer episodio.

Los títulos de cada episodio fueron un punto de partida fundamental para el armado del tracklist. El segundo episodio se titula en parte, "más allá del mundo". Ésta idea es una referencia al sampleado de le artista Chuquimamani Condori que usa el sample “más allá de los sueños” en sus producciones. En este caso reemplazo "los sueños" por “el mundo”, categoría compleja en tanto ha sido usada para globalizar o reducir las experiencias en nuestras realidades, balcanizando / sectorizando en tercios el planeta a merced de geo-políticas de dominio. Entonces, la idea de Yuxta es tratar de ir por rutas de escape a dichas categorías que son atosigantes, por eso más en preciso es, más allá del mundo colonial.

La investigadora Silvia Rivera Cusicanqui es otra referencia en este sentido que, como Condori, trabaja a partir de perspectivas Aymara. En su libro titulado Un mundo Ch’ixi es posible, define el el concepto aymara de lo Ch’ixi como una yuxtaposición cultural en los sujetos de Abya Yala, como si fuese un gris pero que en verdad es una coloración no mezclada por completo, es decir, yuxtapuesta, en tensión pero en funcionamiento. Es una propuesta más allá de categorías complejas y que siguen perpetuando problemas que vienen desde la colonia aún en nuestras realidades como el lugar hegemónico en las narrativas del mestizaje que se transforma en una identidad colonizada, encarcelada al servicio del blanqueamiento.

Lo aymara, en cambio, ve lo Ch’ixi como las manchas de un animal felino, el ocelote es una conexión de retorno al sampleado de Condori que usa a menudo en sus producciones. Más allá del mundo, un Ch’ixi que habla de la diversidad no lineal, la pluralidad de voces antepuesta al silencio.

El primer título habla del Caribe Vegetal como una cuenca en llamas, como lugar de acceso a las complejidades de esa misma yuxtaposición y como referencia a Johan Mijail, que propone una visión de incendio a esas identidades colonizadas para dar paso a una identidad vegetal, reunida con la naturaleza como evocación a esa unicidad africana y originaria de nuestra región, una identidad prolífica, con ciclos y regenerandose como retoños de una planta.

Hay también una referencia a las estrategias de liberación de esta región que están altamente vinculadas a la naturaleza. Veamos las rutas de escape hechas por las mujeres del Palenque de Benkos en sus trenzados, que también cargaban con semillas para después hacer sus siembras para sobrevivir, o las reuniones vudú como antesalas culturales de procesos como la revolución haitiana, primera nación libre en América Latina, altamente anclada en la religión Yoruba del occidente africano en donde la naturaleza tiene un papel vital y primigenio.

La lucha amefricana del cuarto episodio es un guiño a mi trabajo de tesis que conecta experiencias independentistas en el continente y las escucha como legados pioneros en la lucha emancipatoria. En este sentido, me gustaría hablar un poco del Muntú, y de la literatura de Manuel Zapata Olivella y Alejo Carpentier, quienes también han sido puente importante para la comprensión de ese legado. Un legado anclado a la sensibilidad africana de solidaridad y comunidad que se extrapoló en la lucha anticolonial con las experiencias de los palenques, quilombos y naciones completas como Haití. Así mismo, es posible mencionar un innumerable legado en personajes como Remedios del Valle en la Argentina. Esta conexión me permite hablar también sonoramente a través de ritmos presentes en la mezcla como el tango que también es cultural de origen afrodescendiente.

El tercer episodio, Un futuro pazcifico, hace referencia a Francía Marquez , actual vicepresidenta de Colombia, la cual tiene una conexión importante con la lucha decolonial. Es, de algún modo, una actualización de la lucha del muntú, y la sensación de arrullo que se vivencia en esa sensibilidad músical del Pacifico necesaria en anteposición a la realidad de que estos territorios han sufrido las consecuencias de grandes conflictos en la región y que sin duda también es importante voltear a ver, así también el Amazonas, y sobre la necesidad de conservación de estos territorios que son vitales para la continuidad de nuestra tierra.